Es increíble. La sensación de alegría, felicidad, sublimación emotiva no se va. Recuerdo perfectamente ese día, y recuerdo disfrutar a los cóndores tan cerca... Su vuelo despierta un sentimiento de admiración por sobre todas las cosas. Y su curiosidad -girando la cabeza para mirarnos- crea un contacto único.
El Cóndor es el señor de los aires, el majestuoso señor de las alturas.
Un ave que despierta la admiración.
1 comentario:
Qué belleza de animal
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