Sorpresas en el Ñire

En el patio de casa tenemos un ñire. Lo encontramos ya añoso en el terreno entre tanto matorral casi ahogándose. Era un tronco viejo que se veía lindo para leña. Sin embargo no sé por qué me pareció que lo teníamos que dejar.
Ahora es todo un árbol. Su viejo tronco sostiene ramas jóvenes y altas que a lo largo de los años van estirándose un poco más y se pintan marcándonos las cuatro estaciones. Por él han pasado muchas especies de aves.
En estos días de lluvia y frío sumamos dos especies más para nuestra casa, aunque tan solo sean de paso. Eso resultó ser nuestro ñire: un árbol de paso para las aves que van buscando lo que queda de bosque nativo en la zona. Y el ñire las recibe, las acoje por unos minutos o unas horas y luego las deja partir buscando otros rumbos.
Las dos últimas visitas fueron un peutrén y un coludito. Son aves de la zona pero nunca habían venido al patio de casa. El ñire las recibió con carino.

Coludito Cola Negra (Leptasthenura aegithaloides)
Peutrén (Colorhamphus parvirostris)

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